Podemos definir los radiadores como aparatos eléctricos de calefacción que consiste en una serie de tubos por los cuales circula el agua u otros líquidos calientes para ofrecer calor. A continuación definiremos cada uno de los diferentes tipos de radiadores.

Tipos de radiadores

La opción de escoger un radiador para una instalación de calefacción en nuestra vivienda es una opción más que recomendable. Por eso deberemos de conocer bien los diferentes tipos de radiadores que existen actualmente.

Una de las diferencias más significante de los radiadores en la fuente por la cual obtienen calor. De esta manera los diferenciamos entre radiadores de agua, radiadores eléctricos o radiadores de bajo consumo.

Radiadores de agua

Los radiadores de agua se alimentan como su propio nombre indica por agua caliente, garantizando así, un aprovechamiento máximo de las nuevas generaciones de calderas de condensación trabajando a baja temperatura. Pueden funcionar con gas natural, biomasa o sistemas de aerotermia.

La instalación en la vivienda de radiadores de agua implica el tener que realizar una obra completa. Tenemos que realizar una instalación segura de la fuente de energía, el sistema de tuberías, los radiadores y las válvulas de regulación. Por todo esto, recomendamos que la instalación sea realizada por un profesional que garantice la correcta instalación y asegure la máxima eficiencia energética.

Radiadores de baja temperatura

Cuando escojamos una instalación de aerotermia en lugar de una instalación de gas o eléctrica debemos de trabajar con radiadores de baja temperatura. Esto quiere decir, que son radiadores que trabajan con agua a una temperatura de unos 50-60 grados. A diferencia de los radiadores convencionales que lo hacen a una temperatura superior (70-80 grados).

Los radiadores de baja temperatura funcionan a través de convección, gracias a esto conseguimos que el calor entre de forma más directa a nuestra vivienda. Uno de los inconvenientes que podemos encontrar en este tipo de radiadores es que necesitan más superficie para emitir energía térmica. Para poder solventar este problema, muchos radiadores de baja temperatura incluyen un ventilador en su interior. Por tanto, podemos decir que no debemos de preocuparnos por este inconveniente.

Radiadores eléctricos

Los radiadores eléctricos obtienen la energía desde la red eléctrica, consiguiendo así, emitir calor de manera directa a la vivienda.

Su instalación es mucho más sencilla que la necesaria para los radiadores de agua. Para está únicamente es necesaria engancharlos a los puntos deseados y ponerlos en funcionamiento. Tanto su mantenimiento como su regulación es fácil y podremos regularlo para cada una de las estancias de la vivienda dónde tengamos este tipo de radiadores.


Ahora que ya conoces los diferentes tipos de radiadores que existen, ¿Cuál se ajusta más a tus necesidades?